Wednesday, June 27, 2012

Making Me Up



Uno tiene que estar muy alerta si quiere darse cuenta de los momentos decisivos de la vida. No porque no sean obvios pero porque si quiere recordar la primera vez que hizo esto o aquello, o la primera vez que reconoció algo de si mismo en las cosas que hacía, va a ser difícil si se estaba demasiado ensimismado en las cosas.


La primera vez que me dí cuenta de la diferencia que hacía el maquillaje fue un día que por diversión, tomé las sombras de mi mamá y me maquillé para ir a una reunión de la iglesia         [ seeeee, fuí muchos años a la iglesia, por gusto, aprendí, y avancé ]  .... El caso es que empecé a experimentar con los colores y el -que-tal-que-lo-pongo-acá-en-vez-de-aaah-mira-que-bonito-se-ve! y cuando llegué a mi reunión todos me dijeron que bonitos ojos tenia y como nunca se habían dado cuenta.


La diferencia que puede hacer un color diferente, el delineador, las pestañas. Como puede una verse unos años más grande, y los ojos se ven más grandes y los labios más bonitos y blablabla. Y en aquellos tiempos yo tenía muchos problemas internos con mi falta de vista y lo que pensaba que eso significaba. Y arreglar un poco lo que siempre había sido una imposición mejoró un poco mi autoestima. Me dió un poco de esperanza. Tal vez iba a usar lentes para siempre pero damn! se iba a ver bonito. 


Ayer le estaba explicando a un amigo la fabulosa experiencia que es despertar, y poder hacer algo completamente diferente con nuestra cara, nuestros ojos. Como expresar nuestra individualidad con lo creativo o alocado de nuestro maquillaje. Y me quedé pensando que en cierta forma, la nueva oportunidad que se me ofrece de ser cada día alguien diferente me gusta. Me gusta la posibilidad del cambio, de tener un comienzo diferente. De aprender, de borrar y de hacer las cosas mejor el día siguiente.


La individualidad que, cuando tenia 18 representaba con mi ropa negra, mis pins y mis mensajes comunistas, ahora, en mi vida de adulto productivo, que tiene una imagen que presentar y etc etc etc, se representa con mi maquillaje. Es una forma de decirles: Soy libre, y puedo pintar mi libertad en forma de un color diferente cada día. 


Y el punto de todo esto es que podría ser una de esas mujeres que ni siquiera usa rímel, pero no lo soy. Y esto forma parte importante de mi vida. Y recordé justo el momento en el que entendí que asi seria. Y si me da Alzheimer quiero poder tenerlo por escrito. Fin.







1 comment:

Edgar said...

Dudo mucho que la mayoría de las mujeres le impriman este significado a algo que puede parecer tan cotidiano para ustedes... pero si todas lo vieran así, creo que existirían menos problemas de autoestima o complejos con la belleza... porque jamás alguien me había explicado con una buena razón el por qué de maquillarse... las respuestas siempre habían sido superficiales, hasta hoy.